DECLARACION DE UNICEF SOBRE LA SITUACION DE LOS NIÑOS MIGRANTES
Los niños migrantes en la frontera de México con los Estados Unidos
En UNICEF tememos por la seguridad y el bienestar de más de 1.000 niños migrantes:
Que están en tránsito por México o que esperan en la frontera de Tijuana a que las autoridades de inmigración de los Estados Unidos atiendan sus solicitudes de asilo.
“Esos niños tienen acceso limitado a muchos de los servicios esenciales que necesitan para su bienestar, como nutrición, educación, apoyo psicosocial y atención médica. También están en peligro de ser víctimas de explotación, abusos y trata cuando transitan por carretera o están en medio de las multitudes que abarrotan los campamentos y centros de descanso de la frontera.
Se encuentran con esas duras condiciones después de haber escapado de la violencia, la extorsión, la pobreza desoladora y la falta de oportunidades que se produce en sus países de origen, en el norte de Centroamérica.
Los niños son, ante todo, niños, sea cual sea su condición en materia de migración. De conformidad con la legislación internacional, UNICEF insta a todos los gobiernos a garantizar que los niños desarraigados tengan acceso a los procedimientos de asilo de manera oportuna, independientemente de cómo lleguen al país.
UNICEF también insta a los gobiernos de la región a que mantengan unidas a las familias y recurran a alternativas de eficacia demostrada que son alternativas a la detención de inmigrantes, como, por ejemplo, la tramitación de los casos de cada familia por parte de la comunidad. La detención y la separación familiar son experiencias profundamente traumáticas que pueden exponer a los niños aún más a la explotación y el abuso, además de crearles un estrés tóxico que puede tener consecuencias nefastas a largo plazo.
Por último, instamos a los gobiernos a renovar los esfuerzos para abordar las causas subyacentes de la migración irregular: la pobreza, la violencia y la falta de oportunidades educativas y económicas. Hasta que no se aborden esas causas de manera efectiva y a largo plazo, las familias y los niños seguirán abandonando sus hogares y recorriendo rutas migratorias irregulares para ir en busca de su seguridad o de un futuro mejor.
En UNICEF estamos dispuestos a trabajar con todos los gobiernos de la región a fin de garantizar que los niños desarraigados cuenten con la ayuda y los servicios que necesitan y que se respeten sus derechos”.
Fuente: www.unicef.org